Sunset cerca de Oldenburg |
En España hubo muchos, muchísimos, abrazos. Abrazos de todo tipo, y con todos los sentimientos posibles. Fueron unos días que siempre recordaré.
Organizamos la 1ª Carrera Pedestre Villa de Pedrola. Creo que salió bien, pero para la próxima edición desearía doblar el número de participantes.
Volví a descubrir que los amigos son inmensos, que da igual la distancia, y que para mi fortuna, los tenía subestimados. Me da igual como se llamen, o donde vivan, o el tiempo que hace que los vi la última vez ... nos geniales e irremplazables.
Desearía haber estado más en Zaragoza, donde sólo tuve una tranquila cena y una dura despedida, pero Pedrola me llamaba. Querría haber tenido más tiempo para todos vosotros ... pero vuelvo en nada ... y sino, Hostal Ruiz, en Oldenburg está siempre abierto (con servicio de aeropuerto incluido).
Las Voces del Desierto |
La fotovoltaica -mi trabajo- está en clara crisis, y no sé como seguirá. Yo de momento me quedo en las renovables. Es lo menos que puedo hacer por este planeta que nos estamos cargando llamado tierra.
Vuelvo a leer, vuelvo a escribir -encontré mi cuaderno- ... y sigo corriendo.
Ahora toca empezar -casi- de cero ... en Oldenburg, toca aprender a vivir de nuevo.
Y tanto a las orillas del Ebro como del Hunte, lo que he empezado a hacer es -intentar- motivar a la gente a que se una a este maravilloso mundo del running.
Grande Bro! Un besito de la pekeña de la casa!
ReplyDeleteNo tengas miedo de empezar de cero, alguien como tu no debe tener miedo a nada porque puedes comerte el mundo!!!!
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